Peaje de la autopista de Aosta Est y después enfilar la carretera nacional nº 27 por el Túnel del Gran San Bernardo hasta Variney, donde hay que girar a la derecha en dirección a la Valpelline. Tras dejar atrás la población de Valpelline, girar a la izquierda en dirección a Ollomont y remontar el valle del mismo nombre hasta la población de Glassier.

El Mont Vélan se alza sobre la cresta que separa el Valle de Aosta y el Vallese. Presenta facetas muy diferentes: la ladera sudeste se precipita, con una alta muralla de rocas, hacia los pastos de By; la sudoeste es alta y está derruida, pero conserva el modesto glaciar del Vélan, que llega a la meseta de la cima. La pared norte es una compleja sucesión de toboganes y seracs, mientras que la ladera nordeste está ocupada por el glaciar de Valsorey, que tiene su origen en la gran cúpula helada de la cumbre.

Primer día
Desde Glassier, enfilar el bien visible sendero que se dirige a By y sube, entre curvas, hasta llegar a una pequeña iglesia. Aquí, girar a la izquierda hacia un pequeño dique, cuya cima hay que atravesar para llegar al trazado de una carretera agrícola. Tras dejarla atrás, continuar por la pista que sube al Alpe Porchère. Tras dejar atrás la alzada que está más arriba (Tsa Porchère), continuar por el sendero que gira hacia a la izquierda paralelo a una conducción de agua. Un poco más adelante, se entra en un pequeño valle que hay que remontar hasta la formación herbácea donde está situado el campamento Savoie.
Segundo día
Desde el campamento, seguir un sendero que lleva al cañón del Colle de Valsorey. Buscar las señales del sendero que discurren por entre las rocas hasta llegar a la última pendiente que protege el vado. Entrar en este hacia la izquierda y, tras cruzar a la derecha, se llega a la colina. Continuar por la izquierda por la visible cresta rocosa siguiendo las señales de piedra que llevan al Mont Cordine (3.323 m). Desde la cima, bajar hacia un evidente valle estrecho, Col de Chamois, que se puede superar con la ayuda de una cuerda fija, remontar un tramo de cresta hasta llegar al glaciar de Valsorey, dejar a la izquierda los Dents du Velan y remontar dos formaciones nevosas bien visibles que llevan a la cúpula final.
Descenso: por el itinerario de subida.

La actividad requiere experiencia de alta montaña y es aconsejable ir acompañado por un guía alpino.