Fácil itinerario en el valle que conecta el centro de Gressoney-St-Jean con el de Gressoney-La-Trinité pasando por algunos de los pueblos más bellos del valle de Lys. Un recorrido factible y estimulante para quien desea entrar en la historia de la comunidad Walser y apreciar su arquitectura y paisaje.

Desde el estacionamiento, situado frente a la Oficina de Turismo de Gressoney-St-Jean, se cruza el torrente Lys y se tome el amplio camino de herradura inmediatamente después del puente a la izquierda. Debemos seguirlo durante aproximadamente 1,5 km, bordeando el torrente, hasta llegar más allá de una central hidroeléctrica a la altura de otro puente. Allí, no debemos cruzar el torrente, hay que seguir las señales del sendero 14 ó 15 que asciende por la verde ladera en dirección norte hasta llegar a las casas de la población de Rong. En este punto, la ruta continúa entre pastos y bosques hasta Òndrò Biela, para alcanzar más adelante el bellísimo pueblo histórico de Norvesch caracterizado por importantes edificios históricos y un puente de piedra que conecta el pueblo desde 1540. Desde este último, continuar a la izquierda orográfica entre los prados hasta llegar, en pocos minutos, a*Òndrò Eckò*, otro ejemplo interesante de arquitectura local. Encontraremos una capilla y algunos edificios que forman un patio interno con un pozo. Se continúa subiendo hacia las casas de Ôbrò Eckò y se sigue, sobre llano, por un camino de tierra hasta Léschelbalmò. Permaneciendo siempre a la derecha del torrente, se continua por terreno llano entre pastos en dirección a Gressoney-La-Trinité y, una vez que se llega a las primeras casas, se toma el primer camino a la izquierda, se atraviesa la carretera regional, se toma el primer puente sobre el torrente de Lys y, siguiendo el camino que nos encontraremos enfrente, se llega a la iglesia parroquial de la aldea y a la Piazza Tache, el corazón del municipio y sede de la Oficina de Turismo, así como al Museo Walser, ¡cuya visita recomendamos!