La fiesta, cuya primera edición se celebró en el 1972, se desarrolla en la villa de Baulin (1.700 m), al comienzo de Valgrisenche.

La fiocca, la nata, se monta a mano con gran vigor mediante los fouets, varas de sauce, dentro de la “borna”, una de las grutas de cuyas vísceras exhala la respiración del gran glaciar oculto en el vientre de la montaña.

La gran comida al aire libre con platos tradicionales:

• polenta y carbonada (carne guisada en vino)
• soçá (estofado de verduras)
• brossa (crema obtenida del suero de la leche) y quesos.

Por la tarde, llega el momento de la fiocca, ofrecida por la Pro Loco a todos los presentes.